Con fincas propias ubicadas en el hermoso callejón de Huaylas, zona privilegiada con un microclima particular, irrigados por las aguas de los nevados de La Cordillera Blanca, lo que favorece el desarrollo
natural de los berries, alcanzando una gran concentración de aromas y óptimo estado sanitario para la elaboración de los más exclusivos vinos, de sabores exóticos y antioxidantes por excelencia.